viernes, 16 de diciembre de 2011

El amor que no se expresa no sirve de nada

Hace un rato que hablaba de eso en el otro blog... Hace un instante que he leído a Vhasti en el comentario de la entrada anterior hablar de lo mismo. Esta mañana me he encontrado esta imagen a la entrada de un centro comercial:


Al final no se trata del cómo. Se trata de hacerlo. Y cada uno tiene una manera y una forma, y un sello personal e íntimo. Todos tenemos una vía de escape. A unos les gustará el spray en la pared, a otros una carta de amor y otros optarán por un te quiero recién despiertos. Coger de la cintura, decir gracias, besar en la frente o hacer un graffiti. Escribir un poema, acompañarla al médico, llevarle zumo a la cama o enviar mensajes a las cuatro de la mañana. Leerle un cuento, enviar una foto de la ciudad lejana donde el otro no ha estado nunca, besar a destajo o preparar un baño. Hacer la cena, echarle una manta por encima o enviar un pdf con un te quiero en arial tamaño 72. 
Que da igual el cómo. Lo que importa es hacerlo. Sí, hacer el amor a cualquier hora también es un gran gesto. 

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